Este 2023, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se despide del top 10 de aeropuertos que movilizan la mayor carga aérea del país. El AICM lleva varios años siendo el aeropuerto de carga más importante del país, sin embargo, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio la orden de que todo el transporte de carga aérea tenía que cerrar operaciones en el AICM y lo debían trasladar a otro aeropuerto, dando como primera opción el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), gracias a su cercanía con el AICM.

Sobre el decreto

A inicios de año el presidente del país expuso la problemática del AICM, y debido al tráfico tanto aéreo como en las rutas aledañas, exhortó a todos los operadores de carga nacional e internacional mover sus operaciones al AIFA o a otros aeropuertos de la república. En un inicio se dieron 90 días de plazo para que mudaran sus operaciones, pidiendo aerolíneas y concesionarias un plazo de 180 a 360 días para poder acondicionar las instalaciones en el AIFA.

El decreto fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el pasado jueves 2 de febrero, en donde el presidente declara cerrado el AICM para las operaciones exclusivas de carga nacional internacional, por lo que aquellas aeronaves que brindan el servicio combinado de pasajeros y de carga, quedan libres de esta nueva prohibición. Se extendió el plazo a un máximo 108 días hábiles contados a partir del viernes 3 de febrero, siendo el miércoles 5 de julio del año en curso, la fecha límite para que las empresas de carga abandonen el AICM.

¿Qué dice el gobierno?

El anteproyecto fue emitido bajo la justificación de la saturación del espacio aéreo y la capacidad de los edificios en las terminales 1 y 2 del aeropuerto Benito Juárez. A su vez, López Obrador les promete a las aerolíneas de carga que el aeropuerto estará acondicionado con las instalaciones necesarias para la carga y descarga de mercancía en el plazo acordado.

DHL será la primera empresa en operar en el AIFA, su primer avión de carga llegará a finales de febrero y el presidente López Obrador estará ahí para recibirlo.

¿Qué dicen los transportistas?

Transportistas y concesionarios expresan su desacuerdo ante tal decreto, ya que se ven afectados en varias cuestiones:

  • De acuerdo con la degradación a categoría 2 por parte de la FAA, impide a los operadores mexicanos sumar nuevas rutas.
  • Varias aerolíneas cuentan con el mismo personal de apoyo en el transporte de carga que en el transporte de pasajeros, por lo que mudarse al AIFA u otro aeropuerto para las operaciones de carga y mantenerse en el AICM para los vuelos de pasajeros, representará un doble costo para la empresa.
  • El AIFA no cuenta con las instalaciones necesarias ni con el personal necesario para realizar el despacho aduanero, por lo que se tendrá un atascamiento y retraso para la liberación del despacho aduanero en las mercancías.
  • El subsecretario de Infraestructura de Comunicaciones y Transportes (SICT) confirma que se tendrá una reducción únicamente del 3% al mudar los aviones de carga a otro aeropuerto, ya que más del 60% de la mercancía es transportada en aeronaves que dan el servicio combinado (pasajeros y carga).
  • Se está obligando a las empresas a modificar sus cadenas de suministro, lo que se reflejaría, al menos temporalmente, en mayores precios finales a los consumidores o una reducción de oferta en productos que actualmente utilizan el AICM para su distribución.

El desarrollo de carga del AICM tiene más de 70 años en marcha y nunca se pensó en un plan para el crecimiento. El país intenta recuperarse de las secuelas económicas y comerciales que dejó el confinamiento por el COVID-19 y ahora debe enfrentarse a un cambio en sus cadenas de suministro. Las empresas y aerolíneas tienen un gran reto que enfrentar.